Imaginen una pequeña comunidad de no más de setecientas almas, al sur de la península, en pleno Parque Natural de Sierra Nevada. Imaginen un pueblo de las Alpujarras granadinas, un paisaje de sol y tierra no tan distinto del que atrapó al escritor británico Gerald Brennan allá por 1920.
Imaginen a una mujer mirando a su alrededor y pensando –soñando- “aquí podría construirse un teatro”.
Panorámica del Teatro entre todos
El pueblo se llama Laroles. La soñadora en cuestión es la inglesa Anna Kemp que, por uno de esos quiebros del destino, aterrizaba en la zona casi un siglo después que su compatriota Brennan para participar en el rodaje de Al sur de Granada, la película dirigida por Fernando Colomo que versaba precisamente sobre la vida del escritor.
Y el sueño, ya una realidad, ha sido bautizado como Un Teatro entre Todos (www.unteatroentretodos.com). Cuenta Anna, afincada en España desde hace años, que la inspiración para esta aventura –un empeño con tintes épicos en un país castigado por un elefantiásico IVA cultural, además de otras políticas catastróficas- fue el Minack Theatre de Cornwall (www.minack.com). Uno de los teatros al aire libre más famosos del mundo, el Minack se pudo construir y financiar gracias al empeño de Rowena Cade, otra mujer con la determinación suficiente para hacer posible lo imposible.
Un Teatro entre Todos es un escenario, pero también un espacio multiuso en un entorno natural privilegiado, sobre una tierra duramente castigada por la crisis. Es una apuesta por la cultura y el turismo sostenible defendida por Kemp, cofinanciada en una primera etapa por el Ayuntamiento de Laroles, la Diputación de Granada y la Junta de Andalucía y puesta en marcha por los vecinos. Una propuesta para el empleo y la revitalización de la zona alejada de la cultura del pelotazo urbanístico y desarrollada como iniciativa colectiva por los laroleños, que han trabajado con sus propias manos para levantar piedra a piedra las gradas y el escenario (Vídeo)
En el verano de 2013 comenzó la reconstrucción de los muros, utilizando técnicas tradicionales y recuperando el antiguo empedrado cubierto por capas de barro. En la primavera de 2014 se construyeron ciento cincuenta asientos y las obras pudieron continuar con una campaña de crowdfunding. A finales de julio, el espacio contaba ya con un aforo de doscientas cincuenta personas.
Un Teatro entre Todos crecía sobre el suelo de la Alpujarra y sus tradiciones, pero también levantaba el vuelo en las redes sociales donde con la campaña “A seat for a tweet” consiguió despertar el interés de actores como Russell Crowe, Eduardo Noriega o Antonio de la Torre, y de mitos vivientes como Leonard Cohen.
En agosto de este año Un Teatro entre Todos celebraba su inauguración con un fin de semana en el que se representaron trece textos de Federico García Lorca, se ofreció una concierto de jazz-funk bajo las estrellas y se contó con la participación del autor británico Chris Stewart (Entre limones).
¿El futuro? Un festival sobre Lorca en 2015. ¿El propósito? Contribuir a la revitalización de la economía local para evitar el éxodo obligado de una población castigada por el paro.
Y si las fuerzas flaquean, Anna y su equipo recuerdan esa pregunta que formuló Vincent Van Gogh: ¿Qué sería de la vida si no tuviéramos el valor de intentar algo nuevo? Y siguen adelante.
1 Mensaje
01:38
Preciosa propuesta!
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